Los riesgos de amigos - con - derechos - landia
Tu amiga te confesó que no tiene novio, pero si un amigo con derechos y la está pasando bomba. Tu compañero de trabajo está en la misma situación y entre escuchar uno y otro comentario la idea te tienta. Estás decidida, vas a buscar un amigo y le vas a dar todos los derechos del mundo, vas a arriesgar y si haces lo que te cuento a continuación, vas a salir perdiendo, así que presta atención y toma nota. Esto es lo que NO debes hacer.
Hace mucho hablamos de los amigos con derechos y planteamos dos principios de oro para que esta no - relación que es cero compromisos y cien por ciento comodidad, funcione. No darle todos los derechos a un amigo que más que amigo es prospecto y no engancharse. Digamos que se te olvidó, que no leíste ese post, que se te escapó de las manos y aunque lo has negado mil veces, el amigo con derechos con el que la estás pasando tan bien, te encantaba, por lo tanto ya estabas enganchada antes de empezar las escapaditas, que ahora se dan religiosamente cada semana, y hoy por hoy no puedes más de la ilusión, te derrite, te hace babear, te mueres por él.
Por ahora, todo bien, todo suave, porque él te llama todas las semanas, te invita a salir y tu sabes que vas a regresar a tu casa o muy tarde (casi casi con el pan recién salido del horno de tu panadería de confianza), o al mediodía del día siguiente, con un nuevo episodio de esta historia. Te olvidaste lo que canta el gran Héctor Lavoe, todo tiene su final, nada dura para siempre. Hasta que una semana él no te llama, desaparece, no da señales de vida y eso no te preocupa porque total, una es ninguna. Con el tiempo, esas visitas a amigos - con -derechos - landia, dejan de ser constantes, ya solo se ven una vez por mes (y eso) y si antes él tenía un detalle que te entusiasmaba, ahora todo es monótono, rutinario, ya no hay emoción y no es rutina, ni tiempo. Tampoco es desinterés, o sea él está interesado, pero en la nueva chica que ha entrado a trabajar a su área.
Como son amigos y tienen harta confianza, por algo le regalaste todos los derechos del mundo, en un arranque de sensatez te va a contar lo que está pasando y como él imagina que tú la tienes recontra clara, no va a omitir ningún detalle. Tú, liberada, moderna y open mind lo vas a escuchar, lo vas a comprender, te vas a morder la lengua y aunque nadie te vea, vas a curarte esas heridas, ese golpe mortal, tus días como amiga con beneficios están contados. La telenovela se acaba y no fue escrita por Delia Fiallo, ni Corín Tellado, porque no tiene un final feliz.
Veamos otro caso. La idea del amigo con derechos te entusiasma. A tu amiga le va bien, a tu compañero también, a tu vecina la sientes más contenta que nunca. Entonces te subes al coche, pero ojo, este vagón solo acepta parejas, así que inicias tu búsqueda. Haces una listita de todos tus amigos, esos con los que tienes más confianza y que no son canallas.
Escribes tu argumento y te lanzas a la piscina, ubicas por el msn, por whatsapp, por correo o llamas al amigo de tu elección para proponerle un encontrón de aquellos. Si es tu día de suerte, y tu amigo tiene ciertas necesidades que deben ser cubiertas en el menor plazo posible, puede que atraque. Yo se que el que busca encuentra y en estos tiempos de liberación femenina ya no es raro que nosotras demos el primer paso, pero por lo general esta relación del amigo con derechos no se planea, ni se programa, simplemente se da y ya. Los dos quieren, los dos pueden (es decir no están comprometidos, y si lo están juran camuflarlo bien para que no salga herida una tercera persona), los dos se la juegan y los dos solo quieren pasarla bien.
En el otro caso, que la suerte no está de tu lado, tu amigo primero va a creer que es una broma, luego te va a preguntar qué te pasa, te va a decir bien bonito que no y es muy probable que tome respetable distancia de ti, porque es tu amigo. Eso tú lo tienes claro, pero puede que él no. Por lo menos hiciste el intento,ahora te toca o borrar de tu cabeza la idea de seguir buscando, o decir next y arriesgarte con el siguiente, lo peor es que te diga que no y eso lo acabas de superar.
Ahora, digamos que tu amigo es muy caballero y quiere asegurarse de ser parte de tus planes del siguiente fin de semana porque la verdad, la verdad, la pasó súper híper archi bien, cómodo, nada nervioso, o sea, fue una excelente experiencia, y por eso te empieza a llamar más de lo usual. Tú le contestas, conversan, ríen, pero tantas atenciones te parecen raras y asumes que él confundió las cosas y quiere algo más que los beneficios que tu buenamente le has concedido.
Te cuento que en ese caso, la única confundida eres tú, porque él lo único que quiere es seguir pasándola bien, no está naciendo nada en su noble corazón, y a lo mejor tampoco este naciendo nada en el tuyo, solo una ilusión imprudente está haciéndose un lugar en tu cabecita y nula tus demás órganos. Aterriza, tómate todo lo que venga de él con calma, respira, y recuerda que al meterte en esto, te convertiste en una chica de mente abierta, por lo tanto no hay lugar para la ilusión, porque como tu mente está desprotegida, esas ideas entran por una puerta y salen por la otra. Así de simple.
Eso de amigos con derechos, te gusta, pero no quieres perder a tu amigo. Presta atención: hay un estudio que dice que los amigos que en algún momento se tomaron licencias fortalecen su lazo. Ojo, es una teoría, no conozco a nadie que de fe de ello, porque tampoco es fácil encontrar a alguien que te cuente de buenas a primeras que tuvo un amigo cariñoso y ahora ya nada de nada, pero siguen siendo patísimas.
Después de leer esto la idea te parece descabellada, inmoral, peligrosa, inestable. Bueno, los dos primeros no tanto, tampoco exageremos pues, pero sin las precauciones del caso puede ser peligrosa para tu corazón que puede andar sin chaleco antibalas y lo vas regalando alegremente por ahí. Lo de inestable también, porque a la larga los amigos con beneficios (o derechos, o licencias, o cariñosos, o como quieras llamarlo) establecen una no - relación, y en este tipo de vínculo no hay compromisos, no hay correspondencia, no hay sentimientos arraigados e impera el desequilibrio.
No hay garantías, pero si la tienen clara tampoco hay mayores riesgos. Tiene su lado bueno, tiene su lado malo y se pasea por donde quiere por un amplia gama de grises. La última palabra la tienes tú. Piensa con la cabeza y si te quieres aventurar bien, si no,busca una manera dulce, pero impacable de decir siempre no, muchas gracias. Y si tu amigo prospecto se pica, pues respira tranquila porque te acabas de salvar de nadar en un mar lleno de tiburones.
Canción para pensarla... A este par de amigos les fue mejor de lo que esperaban, porque sin querer queriendo, y con muchas ganas, se dieron cuenta de que hacían una pareja perfecta
Aunque no es lo normal, puede ocurrir que una pareja pase de ser amigos con derechos a algo más. Y se dan cuenta en el momento en que tras despedirse, la imagen del otro, una frase, un detalle evidente, un beso robado, una sonrisa compartida, se queda dando vueltas en la cabeza. Por eso es cada vez más difícil decir adiós y conseguir disimular que no pueden estar el uno sin el otro. Esto canta La Oreja de Van Gogh
Escribes tu argumento y te lanzas a la piscina, ubicas por el msn, por whatsapp, por correo o llamas al amigo de tu elección para proponerle un encontrón de aquellos. Si es tu día de suerte, y tu amigo tiene ciertas necesidades que deben ser cubiertas en el menor plazo posible, puede que atraque. Yo se que el que busca encuentra y en estos tiempos de liberación femenina ya no es raro que nosotras demos el primer paso, pero por lo general esta relación del amigo con derechos no se planea, ni se programa, simplemente se da y ya. Los dos quieren, los dos pueden (es decir no están comprometidos, y si lo están juran camuflarlo bien para que no salga herida una tercera persona), los dos se la juegan y los dos solo quieren pasarla bien.
En el otro caso, que la suerte no está de tu lado, tu amigo primero va a creer que es una broma, luego te va a preguntar qué te pasa, te va a decir bien bonito que no y es muy probable que tome respetable distancia de ti, porque es tu amigo. Eso tú lo tienes claro, pero puede que él no. Por lo menos hiciste el intento,ahora te toca o borrar de tu cabeza la idea de seguir buscando, o decir next y arriesgarte con el siguiente, lo peor es que te diga que no y eso lo acabas de superar.
Ahora, digamos que tu amigo es muy caballero y quiere asegurarse de ser parte de tus planes del siguiente fin de semana porque la verdad, la verdad, la pasó súper híper archi bien, cómodo, nada nervioso, o sea, fue una excelente experiencia, y por eso te empieza a llamar más de lo usual. Tú le contestas, conversan, ríen, pero tantas atenciones te parecen raras y asumes que él confundió las cosas y quiere algo más que los beneficios que tu buenamente le has concedido.
Te cuento que en ese caso, la única confundida eres tú, porque él lo único que quiere es seguir pasándola bien, no está naciendo nada en su noble corazón, y a lo mejor tampoco este naciendo nada en el tuyo, solo una ilusión imprudente está haciéndose un lugar en tu cabecita y nula tus demás órganos. Aterriza, tómate todo lo que venga de él con calma, respira, y recuerda que al meterte en esto, te convertiste en una chica de mente abierta, por lo tanto no hay lugar para la ilusión, porque como tu mente está desprotegida, esas ideas entran por una puerta y salen por la otra. Así de simple.
Eso de amigos con derechos, te gusta, pero no quieres perder a tu amigo. Presta atención: hay un estudio que dice que los amigos que en algún momento se tomaron licencias fortalecen su lazo. Ojo, es una teoría, no conozco a nadie que de fe de ello, porque tampoco es fácil encontrar a alguien que te cuente de buenas a primeras que tuvo un amigo cariñoso y ahora ya nada de nada, pero siguen siendo patísimas.
Después de leer esto la idea te parece descabellada, inmoral, peligrosa, inestable. Bueno, los dos primeros no tanto, tampoco exageremos pues, pero sin las precauciones del caso puede ser peligrosa para tu corazón que puede andar sin chaleco antibalas y lo vas regalando alegremente por ahí. Lo de inestable también, porque a la larga los amigos con beneficios (o derechos, o licencias, o cariñosos, o como quieras llamarlo) establecen una no - relación, y en este tipo de vínculo no hay compromisos, no hay correspondencia, no hay sentimientos arraigados e impera el desequilibrio.
No hay garantías, pero si la tienen clara tampoco hay mayores riesgos. Tiene su lado bueno, tiene su lado malo y se pasea por donde quiere por un amplia gama de grises. La última palabra la tienes tú. Piensa con la cabeza y si te quieres aventurar bien, si no,busca una manera dulce, pero impacable de decir siempre no, muchas gracias. Y si tu amigo prospecto se pica, pues respira tranquila porque te acabas de salvar de nadar en un mar lleno de tiburones.
Canción para pensarla... A este par de amigos les fue mejor de lo que esperaban, porque sin querer queriendo, y con muchas ganas, se dieron cuenta de que hacían una pareja perfecta
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