Un día diferente

El aislamiento domiciliario, que empezó el 15 de marzo se prolongó, se prolongó, se siguió prolongando y ¡zás! Me agarró el cumpleaños. Guardaba la esperanza de que para el 19 de mayo ya todos estuviéramos por calles y plazas, con un poco de miedo, pero sintiendo, sin decirlo, que las cosas estaban mejor. La situación es diferente y yo me preparo para recibir mi cumpleaños en #ModoCuarentena.



Digamos que no me termino de hacerme a la idea que voy a pasar mi cumpleaños, mis 30 y todos, encerrada en casa, viviendo los últimos días de aislamiento domiciliario, o eso parece. Mientras más se acercaba la fecha, más he sentido la pegada, porque no he tenido mi tradicional visita al spa más cercano para hacerme las uñas, las cejas y la teñida, que bastante falta me está haciendo. Tampoco he tenido la tradicional tarde de shopping que era una de las actividades que más disfruto, porque admito con orgullo que soy compradora compulsiva. Consumidora soy y no me compadezcas.

Obvio tampoco hay reunión ni pre, ni post cumpleañera con mis amigas. Este año mi plan era ir a ver Av. Larco, el musical, al María Angola un fin de semana después de mi cumpleaños y quedarme en la fiesta de toque a toque. Hace más de un mes, al enterarme que habían cancelado la temporada entendí que eso no sería posible, pero siempre hay un plan B. Esta vez no hubo, y de haberlo planificado ya se habría disuelto a estas alturas.

Lo que más me decepciona es que este debía ser un cumpleaños diferente. No especial, porque considero que cada cumpleaños tiene su toque, o por lo menos, mi familia procura que cada 19 de mayo pase un día bonito, y lo logran con creces. Los últimos 366 días, porque este año es bisiesto, han sido increíbles. Fue un año de despegue, pero también de crecimiento. Evaluemos.

Recibí los 38 trabajando en un lugar en el que aprendía a cocachos y metiendo la pata todos los días, y estudiando, para no sentirme tan perdida en el espacio. Gracias a Dios que así lo hice, ese pedazo de cartón que reúne mi nombre y las palabras aprobada y Diseño Gráfico Digital, me abrió muchas puertas, incluso la de un lugar llamado Grupo Estrategia, o como yo le llamo el mejor trabajo del mundo. A pesar de la tensión, de que cada día tengo más tareas y de que seguir la conferencia de prensa del Presidente me está causando una gastritis, me gusta lo que hago.

En el plano familiar, me gané dos sobrinos cercanos, mi Sebas, que es mi sobrino de corazón, y mi Fabian, mi sobrino de sangre, el bebe mas bonito del planeta, y por el que me derrito. Muchas personas han coincidido en que estoy disfrutando el #ModoTía. Si, lo disfruto y una de las cosas que mas me apena es que no voy a recibir el apapachurrón de mis sobrinos mañana. Entiendo que es por su bien y me conformo con una videollamada, así como el videosaludo que mi otro sobrino Noah me envía por una fina cortesía de su mami, desde que nació.

Y así, feliz por muchas cosas, me alisto para recibir los 30 y todos en #ModoCuarentena


Vieja no, jamás. Destruida, un poco, el cansancio me gana. Quejumbrosa si, siempre lo he sido. Contenta, en realidad satisfecha y decidida a ir por más, por todo y con todo. Fabulosa siempre, eso nadie me lo quita. Convencida de que las cosas llegan cuando tienen que llegar, nunca antes, nunca después; de que no hay un tiempo estándar, cada quien hace las cosas a su propio ritmo; y de que hay que seducir a la vida, aunque nos de la espalda, total, a mi nadie me dice que no.

Bueno, sin almuerzo fuera de casa, sin mis amigas al costado, sin muchos abrazos, pero rodeada del cariño de mi familia, vamos a recibir los 39, y respiro hondo antes de decirlo, pero con la frente en alto, digna ante todo y convencida de que las cosas se pondrán mejor. ¡Vamos todavía!

Canción para celebrar en #ModoCuarentena... Estos días he tratado de escuchar canciones que me reanimen, que me relajen, que me reordenen, o me hagan estallar y caer suavecito como una pluma a la realidad. Esta que es mi himno ha sido precisa para esos momentos en los que lo único que necesitaba era gritar


Hace un par de posts comentaba que no estaba llevando tan mal la cuarentena, a pesar de que envidiaba a todos esos amigos que están en plan H y no con pendientes hasta el techo como yo algunos días. Sin embargo, he descubierto algunas canciones, como esta, que me encanta, pero en esta versión. 








Comentarios

Entradas populares de este blog

Tumba la fiesta

El retorno de la duendecita

Solteronas y solteros codiciados