Se hizo el 8

Un día como ayer hace 8 años me aventuré, casi, casi obligada a crear este espacio. Sandra en su Mundo nació, como tantas veces lo he contado, como una tarea y se volvió en mi hobbie, en mi vehículo de escape, en la validación de que no soy rara, o de que no hay cosas que solo me pasan a mi, o que no soy la única a la que le gusta lo que escribo. Han pasado 8 años y sigo aquí.

No me pregunten si pensé en que esta pequeña bitácora llegaría a cumplir 8 años porque no sé la respuesta. Nunca imaginé cuanto iría a durar esto de contar mis historias, mis teorías, mis puntos de vista, mis speechs, a veces un poco desubicados o demasiado idealistas. Es más, ahora mismo no sé cuanto más me durará la gracia de alucinarme Carrie Bradshaw, con la octava parte de su experiencia y en una ciudad que para nada es Nueva York. Solo se que quiero escribir el resto de mi vida, y por eso me gusta mi trabajo, el mismo que me ha hecho abandonar un poco el blog, aunque hago lo humanamente posible por mantenerlo con vida.

Al inicio tenía mucho que contar, porque me habían pasado muchas cosas. Aparecieron personajes, entre amores, amigas y familiares que fueron plasmados. Las segundas, mis amigas, fueron vitales para la supervivencia de este blog. Nuestras charlas, sus historias, sus opiniones y sus ideas nutrieron este espacio, muchas veces fue justo ese día que no tenía ni media idea de que publicar, o redondearon eso que hace rato me daba vueltas en la cabeza. De hecho varias de ellas son las responsables de que me haya animado a continuar con el blog, si no hubiera presentado la tarea y allí habría quedado la cosa.

Obvio, mis historia fueron las que mas conté, porque son las que mejor se. Esa fue la premisa desde el comienzo, y también lo he contado un montón de veces, uno debe contar lo que sabe y bueno, yo se esto, me llamo Sandra, tengo 30 y muchos años, vivo en Lima y no, no tengo novio. Han aparecido prospectos en estos 8 años, por supuesto que si. En estos 8 años me he ilusionado, he pisado tierra con pies de plomo para no resbalarme, he conocido nuevos amigos, me he reencontrado con muchas personas. Me traté de aventurar con una persona que no era compatible conmigo y fue un desastre, aunque gracias a esa desastrosa experiencia publiqué uno de mis post más leídos, "Hiperactividad".

A pesar de que digo una y otra vez que el hombre perfecto no existe, me olvidé de todo eso cuando conocí a un chico que se me hacía tan perfecto que hasta su punto en contra era perfecto. Obvio que me emocionó, me entusiasmó, me movió el piso, y en un momento pensé que era mutuo. Eso fue justo antes de que desapareciera de buenas a primeras y meses después entendí un montón de cosas y retomé mi teoría, el hombre perfecto no existe. Ni existió, ni existirá.

Pero no solo de amor e historias frustradas vive el blog. Así que me puse a hablar de política, renegar del peor congreso de la historia, que finalmente fue disuelto, de impresentables vestidos de naranja que no pueden hacer nada sin que su pseudo líder, hoy presa porque la Justicia Divina existe (y José Domingo Pérez también), diga amén, y de otro tanto mamarracho que hasta la fecha no sé como alcanzó una curul alguna vez. O sea, díganme que persona con dos dedos de frente le podría dar su voto al poco hombre del Mamani, a la estúpida de Rosa Bartra, al babosazo de Imbecerril, al bulldog de acequia de Mulder. Y no entiendo como en pleno 2020 vamos a tener una gran representación de ese partido de ideas retrógradas y retorcidas llamado FREPAP. Este nuevo congreso también me hará renegar, así que seguiremos hablando de política.

Y como me alucino feminista, con el perdón de las feministas de pura cepa, también he hablado de los derechos de las mujeres, de la violencia de género y demás teorías, y quiero compartir todo lo que sigo leyendo y aprendiendo sobre nosotras. Todas somos víctimas en potencia, no sabemos con quien nos podemos cruzar, no sabemos si llegaremos a casa enteras, sin que nuestra integridad física y psicológica haya sido violentada. Si desde aquí puedo alzar la voz, lo hago sin pensarlo dos veces.

Hay cosas por contar si, lo que no hay es tiempo, pero tranquilos que ya estoy buscando la fórmula para inventar minutos. Como es tradición quiero agradecer porque el blog existe por quienes se siguen tomando unos minutos de su valioso tiempo para leerlo. Gracias por seguir allí, por llegar, por compartirlo. Larga vida al blog, larga vida a mi mundo.

Canción para celebrar los 8... Compartir con mis compañeros de trabajo me está ayudando a entender un poquito mejor a los hombres y a escuchar de todo un poco. El salsero del grupo se sienta a mi lado y estoy redescubriendo canciones que había olvidado que existían y que me gustaban. Esta porejemplo, antiquísima, pero que me sigue poniendo

Esta canción es igual de vieja, pero me sigue gustando y la sigo cantando con ganas. Sabia que llegaría el día en que volvería a decir que estoy bien, más de lo que imaginas, me estoy portando mal y me fascina... Si pues, a veces es divertido ser una chica mala, además principio del blog, la villana de la novela siempre se divierta más que la dulce y sufrida heroína