Entradas

Mostrando entradas de junio, 2017

Me como el pleito

Imagen
Una pregunta, ¿el Congreso debe fiscalizar el Poder Ejecutivo y proponer proyectos de ley que favorezcan a los peruanos, o es su función ponerle cabe al Presidente e interpelar y seguido nomás censurar a todos sus ministros por lo que sea? El Congreso se ha convertido en un chiquero, un circo y un matadero, todo al mismo tiempo. Por eso, es necesario comerse el pleito. Hace algunos meses, el Ministerio de Educación presentó un spot a favor de la nueva currícula escolar. En esta propaganda participaban una serie de actores y personajes públicos apoyando la iniciativa. Los que están en contra de la reforma se pronunciaron al toque y empezaron a  criticar, primero al Ministerio por gastar la plata en ese tipo de anuncios. Cuando el Ministerio respondió que quienes participaron en el spot lo hicieron de manera voluntaria, la crítica fue hacia ellos.  Gonzalo Torres, Wendy Ramos, Melania Urbina y todos los que dijeron frente a una cámara Yo apoyo la Reforma Educativa, fueron en

Por un mal amor

Imagen
Cuando estamos en esa fase en que los preferimos malos, nos fijamos en el menos indicado, ese mismo que en algún momento nos dejará heridas, moretones y un corazón hecho añicos. Un tiempo después, más lúcidas y decididas a no ser un imán de patanes nunca más, recuentas los daños y entiendes todo lo que te hizo pasar ese mal amor. Por un mal amor nos volvemos ciegas. Nos dejamos deslumbrar. Inventamos cualidades. Minimizamos defectos. Creemos las historias mas inverosímiles. Se duermen nuestros sentidos, incluido el olfato y el tacto. Anulamos nuestra intuición. Nos acostumbramos a escuchar y creer mentiras. Solemos mentir para justificarlo y justificarnos. Pensamos en él, antes que en nosotras. Destrozamos nuestros nervios, nuestra paciencia y nuestra tolerancia en cada discusión. Nos culpamos. Nos disculpamos. Nos negamos a despertar. Cada día nos queremos un poquito menos. Olvidamos quienes somos realmente. Por un mal amor  desarmamos el prospecto. Afirmamos que el hombr

Yo doy para más

Imagen
Digamos que tu última relación se desgastó. Al sentir que ya no habían temas, ni visiones, ni objetivos, ni tantos gustos en común, decidiste poner punto final. La gota que rebalsó el vaso fue su apatía y su falta de ambición, yo doy para más dijiste, respiraste hondo y le diste vuelta a la página. Eso de yo doy para más sonaba bonito y parecía una buena idea al principio. Por eso no te dolió dejarlo a él en estado de shock, con un montón de preguntas sin respuesta y sin despedidas dramáticas. Simplemente le dijiste hasta aquí y te fuiste. Sabes que es doloroso, que para él es un golpe bajo, pero es necesario porque te quieres más a ti, y no es egoísmo, es autoestima. Te repetías que merecías algo mejor. Pasaron los meses y ese alguien mejor, que te merezca, no aparecía ni por casualidad, a pesar de que lo buscaste por calles y plazas, entiéndase bares, discotecas de moda, restaurantes de cuatro tenedores para arriba, resorts, en fin, todos esos lugares donde te mereces ir

Hiperactividad

Imagen
Unos 20 años atrás cuando un niño no estaba quieto un solo minuto, los padres, y hasta profesores, concluían de que era un chico inquieto y que era una etapa. Ya se le pasará pensaban. Hace algunos años la cosa cambió, y un niño inquieto en exceso es un niño hiperactivo. ¿Qué pasa cuando el niño crece y se relaciona con el resto del mundo? Las consecuencias pueden ser desastrosas. Niño que no es inquieto, no es niño, sin embargo el niño hiperactivo se mueve de un lado al otro sin un propósito e inician una actividad que abandonan al poco tiempo, sin concluirla, para iniciar otra con la que repetirán el patrón.  Los expertos dicen que la hiperactividad aumenta cuando los niños que la padecen están en presencia de personas que no suelen frecuentar y disminuye al estar solos. La hiperactividad siempre viene acompañada de un déficit de atención, y es ahí cuando los padres se alarman y entienden que su hijo necesita ayuda, y ellos también. ¿Hay adultos hiperactivos? Si, y tiene